Nueva Advertencia del Vaticano
Pecados Capitales
Desde "El Vaticano" se advierte sobre los nuevos pecados Capitales o Pecados sociales.
La manipulación de los genes, generar pobreza, la riqueza en exceso, la drogadicción, y la contaminación del ambiente están entre ellos.
Los tiempos modernos requieren poner atención en nuevas faltas -que son de suma gravedad- y se cometen en épocas actuales. Por lo tanto el Vaticano expresó a sus fieles que deben tener sumo cuidado para no cometer estas faltas que hoy se incorporan como “nuevos pecados”.
La lista de “las nuevas formas de los pecados sociales” fue dada a conocer a través del arzobispo Gianfranco Girotti, Segundo en jerarquía en el área de pecados y penitencia del Vaticano; en el periódico “L’Osservatore Romano”.
Girotti mencionó el tráfico y consumo de drogas, las injusticias sociales y económicas como pecados modernos, sin olvidar al aborto y la pedofilia como las más grandes faltas que condena la Iglesia Católica.
Los nuevos 7 pecados sociales dados a conocer por el Vaticano son:
1. Las violaciones “bioéticas” como la anticoncepción.
2. Los experimentos “moralmente dudosos” como la investigación en células madre.
3. La drogadicción.
4. Contaminar el medio ambiente.
5. Contribuir a ampliar la brecha entre los ricos y los pobres.
6. La riqueza excesiva.
7. Generar pobreza
Nota: Obsérvese que los 7 pecados capitales establecidos por el papa Gregorio I en el Siglo VI (14 siglos atrás) hoy resultan insuficientes para advertir lo que "se debe o no hacer" en el mundo moderno de estos días, sujeto a permanentes cambios o a nuevas formas de cometer actos que perfectamente encasillan en la tipología de PECADOS. Y lo que resulta destacable que el calificativo de los mismos sería -a nuestro entender- de "MUY GRAVES".
Resuena '¡Que viva el Papa!' en español en la Casa Blanca.
Los viva fueron pronunciados a la llegada del Papa por algunos de los católicos de origen latinoamericano presentes en la ceremonia, a la que asistieron cerca de 13 mil personas.
Varios "¡Qué viva el Papa!", gritados en español, rompieron hoy la protocolaria ceremonia de bienvenida a Benedicto XVI que organizó el presidente de Estados Unidos, George W. Bush, en la Casa Blanca.
Los "viva" fueron pronunciados a la llegada del Papa por algunos de los católicos de origen latinoamericano presentes en la ceremonia, a la que asistieron cerca de 13 mil personas, según las cifras dadas por las autoridades estadounidenses.
Respecto al resto de asistentes, los hispanos que hoy esperaron durante horas bajo el sol en los jardines de la Casa Blanca no eran muchos, aunque en realidad entre los católicos de Estados Unidos son más de 30 millones (un 35 por ciento).
Algunos de los hispanos presentes eran residentes en Washington, pero otros llegaron desde la costa Oeste para encontrar a un Papa del que "saben poco" y que quieren conocer, explicaron.
"No lo conocemos tanto como a Juan Pablo II, pero con esta visita se va a ganar nuestro cariño", explicó a Efe Romanita, una joven nacida en Estados Unidos e hija de inmigrantes mexicanos.
Según Romanita, los católicos estadounidenses no conocen a Benedicto XVI, pues lleva solo tres años de Pontificado y los medios de comunicación del país ahora están empezando a hablar de él.
"Yo creo que Benedicto XVI es un gran hombre, una persona profunda y muy intelectual", añadió.
Romanita ha venido acompañada a la Casa Blanca de parientes y conocidos, entre ellas Antonia Jiménez, madre de una de sus amigas, y quien ha llegado desde Texas para poder sentir la "emoción" de ver al Pontífice.
"No es tan solo un honor sino una bendición poder tener al Papa en Estados Unidos, y sobre todo aquí tan cerca", dijo Antonia, visiblemente emocionada.
En su discurso, el Papa se presentó como "amigo y anunciador del Evangelio" y explicó que "los católicos de América han ofrecido y siguen ofreciendo una excelente contribución a la vida de su país".
Asimismo, deseó que su visita a Estados Unidos, que comenzó ayer y durará hasta el domingo, "pueda ser fuente de renovación y esperanza" para este país y refuerce la voluntad de los católicos de contribuir más responsablemente a la vida de la nación.
"Son palabras que nos dan esperanza", dijo Romanita, tras asegurar que se trató de un discurso "emocionante".
Asimismo, destacó los elogios a la "generosidad" y a la "pluralidad" que el Papa dedicó a Estados Unidos.
"Nos hacen sentir que, al fin y al cabo, somos una buena nación". añadió.
Entre los latinos presentes en la ceremonia también se pudieron ver a algunos soldados en la zona reservada en los jardines de la Casa Blanca para los ex combatientes de las guerras de Irak y Afganistán.
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